Epidermólisis bullosa

Las heridas dolorosas suelen ser habitualmente heridas crónicas complicadas, siendo el dolor un síntoma multifactorial como ya hemos visto en el capítulo 5. El dolor en la herida puede estar relacionado con la infección o con una mala selección de apósito, una mala técnica de vendaje, etc. Otro problema importante en las heridas es el picor, que también se ha abordado de manera más profunda en el capítulo 6.

El olor intenso es un síntoma relativamente frecuente y molesto en las heridas a causa de EB. Igual que el dolor, el olor empeora normalmente cuando hay infección en las heridas. Pero otras causas pueden ser la imposibilidad de cambiar los apósitos y vendajes tan frecuentemente como se necesitaría o la imposibilidad de usar los apósitos más idóneos para cada herida. Sin embargo, a veces las heridas pueden ser olorosas incluso cuando no hay infección o cuando los cambios de apósito y la higiene corporal se hacen de manera estricta; esto puede darse especialmente en zonas donde hay climas húmedos y cálidos, o en hogares muy pequeños o sin ventilación. Algunas de las medidas para abordarlo son:

• Consultar cuando hay un cambio importante en el olor de las heridas para tratar de manera precoz las infecciones.
• Cambiar los apósitos y limpiar las heridas en la ducha o el baño siempre que sea posible. Si no es posible, se recomienda limpiar vertiendo agua directamente sobre la herida (con ayuda de una jeringa) o aplicando fomentos con gasas húmedas. Los fomentos son telas o compresas empapadas en una solución acuosa que se aplica sobre la piel. El contacto prolongado en el tiempo facilita la penetración y, por tanto, la acción de esa solución en la piel a tratar.
• No dejar los apósitos más días de lo indicado por la enfermera, y cambiarlos antes en los casos donde el exudado de la herida se filtre a través de los vendajes.
• Utilizar algunos apósitos con carbón activado siempre que sea posible proteger la piel (ya que suelen ser adhesivos), siempre bajo supervisión de los profesionales expertos. En algunos casos se recomienda el uso de geles o líquidos con productos anti-fúngicos para tratar las sobreinfecciones por hongos; su indicación debe ser médica.

• Puesto que el olor puede generar sentimientos de vergüenza, culpa o tristeza, es recomendable poder hablar con las personas de nuestro entorno sobre este tema.
• Otra recomendación que puede ser útil es utilizar prendas de ropa transpirables.